Miguel Gutiérrez, presidente de YPF, comentó sobre la gestión de Juan José Aranguren, ministro de Energía por la liberación de los precios de los combustibles. Gutiérrez Planteó que faltan medidas para que el “libre mercado sea libre mercado”. Entiende que tal como está planteado es un escenario desfavorable para la principal petrolera del país.

Gutiérrez dijo en el cierre de las conferencias de CEO de la Oíl and Gas 2017,  “Creo que tenemos que trabajar en las próximas semanas para definir varios aspectos que no están claros. Entiendo que deberíamos bajar la ansiedad”. El presidente de la petrolera planteó que hay cuatro puntos que deben repensarse. En principio recordó que el acuerdo vence el 31 de diciembre en alusión a que si los precios internacionales del barril caen por debajo de los 55 dólares la suspensión se levantaría.

Así mismo se preguntó qué ocurriría si en el futuro los valores del crudo aumentan: dijo que debería dotarse al Poder Ejecutivo de una herramienta impositiva para “morigerar el impacto que pudiera tener en la economía doméstica”. Pero centralmente apuntó contra el registro de operaciones de importación de petróleo y derivados. “No hay mercado libre si ese decreto no se elimina. Exige que para importar o exportar hay que a ir a un registro”, dijo Gutiérrez. En el pasado reciente los competidores de YPF aumentaron sustancialmente los volúmenes ingresados al país.

El ejecutivo planteó que no existe claridad sobre las regulaciones para el biocombustible, que es uno de los componentes en la refinación de crudo. Cuando se le recordó que los precios para ese segmento son definidos por el gobierno nacional, Gutiérrez asintió con una sonrisa. Consultado sobre si los combustibles necesitaban un aumento en octubre, Gutiérrez respondió que sí. Sin embargo agregó que “con estas condiciones no podemos aumentar” en referencia a que no estaría claro si hay mercado libre o no. También descartó que se trate de un tema electoral.

En el inicio de su repaso por las acciones que lleva adelante la compañía destacó el alcance de las estaciones de servicio. “Tenemos más de 1.500 estaciones, 200 de ellas están en lugares donde no hay nadie más. Es un seis o siete por ciento de nuestro mercado, pero si nosotros no estuviéramos no sería de nadie porque sólo estamos nosotros”, aseguró y pidió perdón por pasar “un aviso”.

Las referencias a Vaca Muerta volvieron a estar en el centro de la escena. El presidente de Shell Argentina, Teófilo Lacroze, aseguró que la formación tiene “varias ventajas sobre el resto de las rocas generadoras”, sin embargo planteó que también encierra desafíos. Tras indicar de resolverlos el país podría producir en forma rentable, planteó que los desafío son: una reforma del régimen fiscal, mejor infraestructura, elevar la curva de aprendizaje, y los tiempos no productivos que derivan de los conflictos que dijo, “son valores relevantes”.

 

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here